lunes, 11 de noviembre de 2013

LOS PICOS DE ERISTE (VISIONES EN EL CAMINO DE POSETS)

Si la contemplamos desde el Oeste (Viadós resulta el lugar más indicado), la descomunal muralla de POSETS-LLARDANA, interrumpe sus fieras crestas y los enigmáticos colores de sus estratos en forma de voluta sobre una marcada entalladura en forma de "V" que se conoce con el nombre de FORQUETA DE ERISTE, que no es otra cosa que el importante y altísimo collado (2880m) que nos abre el paso hacia otro valle, el de ERISTE; región de naturaleza granítica con otros colores y otras formas. Pues bien: justo al otro lado de esta entalladura que es el estratégico paso del Collado de la Forqueta de Eriste (muy pocos son los que en el Pirineo alcanzan esta altitud; mayor que la de muchas montañas), se alzan los amables, estéticos y armónicos perfiles de los tres picos homónimos. Tresmiles solitarios cuya ascensión no es fácil, sin embargo, presentan una cierta cantidad de nieve por el lado de Viadós hasta bien entrada la temporada, lo que añade, si cabe, una mayor condición estética a sus ya de por sí prototípicas laderas. Exploré esta zona por vez primera el año 1999, acompañado por David y mi hermano, en una fructífera campaña que nos llevó, un día antes, a la conquista de la PUNTA DEL SABRE y el GRAN BACHIMALA... Efectuamos la ascensión por la marcada ruta de los LAGOS  DE MILLARES; aunque a partir de aquí, enfilamos directamente hacia la brecha entre el GRAN ERISTE ó BAGEÑOLA-objetivo de la jornada-y el ERISTE NORTE ó PICO BERALDI, cruzando una inmensa canchalera de bloques hasta alcanzar el nevero superior. Cabe añadir que en el descenso, en el cual efectuamos un flanqueo hacia el más amable puerto de Millares, tuvimos que montar un rápel para superar la verticalidad de la  mencionada brecha, un corredor pulido y húmedo por el efecto de la retirada de la nieve (los rastros de lo que debe ser, la mayor parte del año, una rimaya)... ¡Y allí se quedó la cuerda, atascada, en una doblada de 15 metros! Un peaje que consideramos natural dada la magistral ascensión y el magnífico día que nos hizo allá arriba, colgado a 3075m con vistas a la zona de BENASQUE. (Pude llamar por teléfono... cuando los móviles eran ladrillos y la red de AMENA muy escasa!)

 FOTO 1: Los ERISTES y el PICO MILLARES (izqda.) detrás de la  fabulosa arquitectura del PUNTAL DE BARRAU / ES LENERS [Con zoom, desde la campa de encima del refugio de VIADÓS]

FOTO 2: La lóbrega entalladura que separa el POSETS-LLARDANA del grupo LAS FORQUETAS-MILLARES-ERISTES. Se aprecia claramente el perfil en forma de aguja de la FORQUETA OCC., cuya subida por la cresta que arranca inmediata al collado resulta, sin embargo, una cómoda y agradecida trepada.

FOTO 3: El sistema al completo: del PICO DE LOS VETERANOS a LOS ERISTE, de Norte a Sur, pasando por EL POSETS, LAS ESPADAS, el Collado de la Forqueta de Eriste, LAS FORQUETAS, el PICO DE MILLARES (un 2900 apenas visitado) y LOS ERISTES, ocultos, en parte, por el comentado PUNTAL DES LENERS/ BARRAU



 FOTO 4: Anexo libre del REFUGIO DE VIADÓS. Y la campa frontal ahora sumergida en la sombra, pero que con el solecete dándote en la espalda atormentada por la mochila y el sudor, en verano, resulta el lugar más alucinante para la contemplación estética (también literaria) de los que conozco en toda la Cordillera!
 FOTO 5: Arquitecturas de granito-PUNTAL DE BARRAU, tras cuya enigmática cresta se esconde la cuenca de los LAGOS DE MILLARES; ERISTE NORTE (ó BERALDI) de 3025m y, oculto tras el PUNTAL, asoma el costado NW y el nevero terminal de subida que te saca a la otra vertiente (a las amplitudes caldeadas de BENASQUE) por la comprometida rimaya y brecha donde tuvimos que abandonar la cuerda el año 1999. 
FOTO 6: El alto paso de LA FORQUETA DE ERISTE (2860m) y la amplia cresta de ascenso al tresmil homónimo, cuya cumbre toca el  extremo derecho-sup. de la estampa.

FOTO 7: FORQUETAS, MILLARES, BERALDI, GRAN ERISTE Y PICO DE LA  SOLANA
 FOTO 8: Terrible estampa de los ERISTE cuando salimos a la LLANADA DEL CLOT, punto  estratégico de la ascensión a POSETS, en el que abandonamos  definitivamente el bosque. Justo en la vertical de LAS ESPADAS, cuyas tétricas agujas nos vigilan medio km por encima.
 FOTO 9: ¡LOS ERISTE!










FOTO 10: ¡ODA A LOS PICOS DE ERISTE! (Rogelio)




domingo, 10 de noviembre de 2013

L´AINSA- LA PUERTA DEL PIRINEO

Aunque ya había pasado por AINSA un buen puñado de veces (¿diez, quizás?), nunca antes había sido más que para comprar algún mapa, o material olvidado...;  un regalo, a la vuelta, para mi mujer o mis hijas, o un rápido desayuno antes de acometer el largo camino de regreso cruzando Aragón de cabo a rabo, para salir por el Rincón de Ademuz, 400km más allá, hacia los desolados altiplanos de Cuenca, donde inviernos crudísimos arrasan cualquier vestigio de civilización amable y colorida. 
              Esta vez, sin embargo, en un cómodo viaje posibilitado por la autovía que surca Teruel, Zaragoza y Huesca como si de un espinazo se tratase, y el buen tiempo (es 12 de Octubre) nos plantamos a media tarde en L´AINSA... No sin antes alucinar con gratitud de náufragos ante los perfiles que aparecen como islas de promisión sobre los horizontes arrasados de GUARA y el Somontano de BARBASTRO, donde, por el dédalo de curvas y cuestas, junto al Embalse de El Grado y el enigmático ingenio de Torre Ciudad, lugar de peregrinación cristiana y de recogimiento a la vista de la bravura de la Naturaleza, recordándonos que el desierto de España sabe recompensar al viajero. [Descubrimos con incredulidad una autovía que emerge como por ensalmo del rugoso yermo de la campiña: la A-22, Huesca-Lérida. Impresionante! Y muy agradecida ruta, también. 50KM que se despachan en unos minutos sin el tráfago peligroso de camiones que recuerdo de anteriores citas).

De manera que... nos detenemos y, en mitad de una atmósfera cálida y esplendente, subimos la escalinata que, entre sombras de alisos, nos saca al pórtico de la Plaza Mayor: ingeniería medieval de piedra a modo de fortaleza. Allí, sobre la cinta de la muralla, escuchando a un músico cantar a los inviernos y el desamor, miramos hacia MONTE PERDIDO y la PEÑA MONTAÑESA; hacia las TUCAS y la PALA DE MONTINIER, hacia OTAL y TENDEÑERA...








domingo, 20 de octubre de 2013

POSETS, 3375M. AVENTURAS MONTAÑERAS PASADAS Y PRESENTES

Fue en 1995 -un mediodía radiante de principios de Julio, tras una nevada épica el día anterior que nos  cogió por sorpresa en La Munia- cuando, cándidamente emocionados, le vimos el fiero rostro al POSETS. Esa pared ciclópea de color óxido que comparte con LAS ESPADAS... abismos erizados de agujas y placas airosas como aletas de tiburón. Llegábamos por los bosques canadienses del estrecho   valle del Cinqueta hacia el ensanche del Campamento de La Virgen Blanca, unos metros por debajo, y al Sur, de Las Granjas de Viadós, donde se ubica el refugio homónimo que con los años llegaría a ser nuestra base preferida del Pirineo. Llegábamos, decía, con un alma limpia predispuesta a la emoción pura y sincera, potente y literaria..., que sólo la juventud puede proporcionar (yo tenía 25 y David, ya en aquel entonces muy fuerte, 17); también, con toda la impedimenta húmeda y la moral deportiva por los suelos: no en vano la enigmática MUNIA nos había rechazado justo en el Collado por cuenta de una nevada sorpresiva y de peligrosa intensidad, que ahora tenía cubierta por completo la cresta del POSETS-ESPADAS. Habíamos establecido un campamento de altura doscientos metros por debajo  de los Lagos de La Munia y, cargados como burros, habíamos tenido que descender casi a la maldita carrera: fue el día en el que aquel pastor  de Monzón nos esperó justo antes del comprometido destrepe a los llanos de La Larri.

Foto 1: El formidable edificio de POSETS- LAS ESPADAS, cuyas fieras arquitecturas erizadas de agujas y crestas afiladas como cuchillos, y ese color veteado de ocre característico, le confieren esta terrorífica apariencia... Cuando se la ve por vez primera desde el cruce de caminos de TABERNÉS-VIADÓS (que coincide con la bifurcación de los dos CINQUETAS, el de AÑES CRUCES y LA PEZ), justo a la altura del recoleto Camping de EL FORCALLO, la sensación no puede ser otra que la de admiración expectante, temor y ganas de subir. Los mitificados bosques de Alaska o Canadá encuentran en este paraje un remedo digno del más exigente de los fotógrafos de la Naturaleza.


Foto 2: LA LLEGADA. A pie de refugio, aparcamos en el único lugar disponible a la orilla del camino de las Bordas de Viadós, que aquí termina. Un poco más atrás existe una explanada en la última curva del camino, incluso más idónea para tal fin: pero ocupada hoy por los únicos cuatro o cinco autos que caben. (Me comenta David que tuvo noticia por parte de un amigo sobre la restricción al paso de vehículos en el tramo Virgen Blanca-Viadós: la última y larga rampa que siempre resulta un suplicio para vehículos y conductores... Mucho más cuando, como en mi caso, estamos prestos a alcanzar la cifra de 600 en el cuenta kilómetros. 580, para ser exactos). En cualquier caso, y a pesar de las evidentes mejoras,  el camino que se adentra desde San Juan de Plan y la cerrada curva ascendente hacia Gistaín, acompañando el curso del oculto Cinqueta, a la búsqueda de la abertura del valle en la que confluyen los dos Cinquetas, es una tortura para la mecánica y así debe seguir siéndolo: no conozco lugar alguno accesible a las multitudes que se conserve en buen estado.





Muy pocos lugares del Pirineo te permiten holgar al sol de la tarde en un altozano herboso y contemplar el espectáculo de uno de los grandes de la cadena. Del PICO DE LOS VETERANOS hasta los PICOS DE ERISTE, esta airosa cresta por encima de los tres mil se extiende unos diez kilómetros de Norte a Sur y separa los valles de VIADÓS y ERISTE. Lugares con entidad propia y matices que los individualizan frente a sus vecinos, estos valles son la entrada natural hacia los secretos bien guardados de la montaña. ERISTE es el dominio del granito y de las formas glaciares que se expresan con rotundidad, casi como cuando abres un libro de geografía... VIADÓS es el dominio de los bosques y la floresta típica de los ríos... donde el verde vivo de las alisedas y los sauces, contrasta con el estoicismo oscuro de los pinares y el rojo y amarillo de los esquistos en las alturas...

                                     PLANO DE SITUACIÓN DEL VALLE Y REFUGIO